La historia de hoy, tiene que ver con el amor, ¿Por qué con el amor? Bueno a modo de introducción hablare un poco de mí, nunca tengo suerte en el amor, es un hecho, chequeado (así habla alguien que estoy empezando a querer, pongámosle Hanalea). Siempre historias con finales malos, con engaños incluidos, historias que prometen y después se van a pica cual titanic, he vivido varias experiencias de este tipo, y después quedo destrozada, todos en algún momento nos hemos sentido así, no soy la única, pero se preguntaran que tiene que ver esta introducción con las cosas que me pasan, simple, hice un regresión espontanea al pasado, y esa es la historia que hoy me traigo abajo del brazo.
Esto sucedió hace 3 años, recién me había peleado con el que era mi novio en ese entonces, y me fui de viaje con Mamá y una de sus amigas, en el hotel que parábamos había de todo, sauna, hidromasaje, piletas, al estilo lo pedís lo tenes, bueno más o menos así, y por supuesto el infaltable spa, debo reconocer que si hay algo que me gusta son los masajes, estaba realmente triste, así que pensé, me hago masajes, que no me aliviaran el dolor que siento, pero me reconfortaran desde otro lugar, empecé a hacerme masajes regularmente, digamos todos los días, y siempre me los hacia la misma persona, una chica muy joven, hablábamos obvio porque uno, no se tira en la camilla cual momia, va, a mí me gusta hablar así que hablábamos, sale el tema de la energía, ¿raro no? Y me comenta que hay un tipo de técnica vamos a ponerle, porque no recuerdo el nombre, en donde lo que hacen es correrte la energía por el cuerpo. Concertamos para hacerme esa técnica para el día siguiente.
Al otro día llego, como todos los días previos, me subo en la camilla, y ella me explica en que consiste, a ver, no sé si alguien se hizo alguna vez drenaje linfático, bueno esto es muy similar, es como una caricia, cierro los ojos, y al toque empiezo a “ver” y otra vez esta palabra y otra vez entrecomillada, digo ver, es como si de repente hubiese pasado una peli, lo primero que veo es un vaso o vasija de color terracota, me veo a mi misma observándolo desde arriba, lo segundo que siento es el calor, un calor abrazador, miro el paisaje desértico, arena, dunas, por doquier, y me veo a mi misma aunque en ese momento yo era un hombre, y me veo vestido con muchos mantos, superpuestos, de tez oscura, morocho de pelo negro azabache, con barba, el resto lo “se” con esa convicción interna que no da lugar a dudas, que estaba casado, que tenía dos hijos, y que no amaba a mi mujer, en ese momento en ese lugar, yo me preguntaba porque a pesar de lo buena esposa y buena madre que ella era, yo no la podía querer, la respetaba obvio, pero no la amaba ni un poco. A ella no llegue a verla y a mis hijos tampoco. También supe cuál era mi profesión, era un comerciante, me dedicaba a vendar esos objetos de terracota que veía al inicio de la película en cuestión, los compraba en un mercado grande y después volvía a mi ciudad, y los vendía. Me viene una segunda imagen a la cabeza me veo llegando a una casa muy bonita, de piedra, pero grande, daba impresión de que ahí moraba alguien muy rico, y quería comprar mis productos, me veo hablando con un hombre, sobre las mercancías, el precio y demás, y en eso a través de una arcada que daba al lugar en donde nos encontramos aparece una mujer, flaca y esbelta, de piel alabastro, usaba un velo, solo le pude ver los ojos: nunca debería haberla mirada a los ojos, porque fue como un sortilegio, caí rendido de amor por ella.
Me veo volviendo a la casa, y tratando con ella, siempre hay gente alrededor, o sea nunca podemos estar a solas, sigo enamorado de ella.
Es ahí en ese momento en donde la masajista me llama y me dice te tenes que dar vuelta, me di vuelta a regañadientes, quería saber cómo terminaba la historia, pero después no vi más nada, aunque como verán la historia sigue fresca en mi cabeza, como si fuera ayer.
Hace poco con mi psicólogo hablamos de darme el alta, ni yo me la puedo creer, y ya el año pasado, había salido este tema, de la mediumnidad, de las regresiones a vidas pasadas, él me recomienda a otro psicólogo que hace, este tipo de terapias, todo pasa por algo, o eso me gusta creer, en la próxima charla, voy a hablar de esto con él, necesito saber cómo terminaba esa historia, porque muchas de las cosas que me pasan me saben a karma y la única forma de resolverlo es volviendo para atrás.
Ahora si, me despido luz para todos.
Eritrea.
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