jueves, 7 de julio de 2011

El gualicho

Bueno hoy quiero contar algo que paso ya hace varios años, yo rondaba los veintipiquitos, lo que sí sé es que, hacía poco que había fallecido papá, o sea, que yo tenía poco más de 21 años, fue una de las épocas más tristes de mi vida, para mi viejo yo era y soy (o eso me gusta creer a mi) “la luz de sus ojos” y para mí, mi viejo era la luz de mi vida, como ame a mi papá, pero me estoy yendo por las ramas, creo, esta historia de hoy es sobre una de las primeras visiones que yo tengo, no la primera, pero si una de las primeras, hacia relativamente poco tiempo que viva acá en buenos aires, en el barrio de congreso, y por ese entonces estudiaba medicina y  vivía con una amiga.
El día que paso esto, ella no estaba, no recuerdo a donde se había ido, sí que yo estaba sola en el pequeño departamento de dos ambientes, no recuerdo el lugar específico donde me encontraba, si en el living, en la cocina o en la pieza, pero lo  sí me acuerdo de forma patente, es que  en determinado momento me agarro una angustia terrible, (similar a las que me siguen agarrando ahora), pero esa vez, en ese entonces, fue como ver una película, mejor dicho un tráiler, pasar frente a mi ojos,  pero de terror, ahora entenderán porque, vi  a alguien, una mujer, no recuerdo la ropa, pasaron demasiado años, el dato clave de esto es que esta señora, sostenía en sus manos una foto mía, ¿cómo lo supe?, y es claro, yo estaba viendo la foto y a ella, la angustia aumento, no sé cómo lo supe, supongo que como también puedo saber otras cosas, pongámosle intuición,  la señora en cuestión me estaba haciendo flor de gualicho !!!!!!!!! .
Le voy a seguir diciendo señora a lo largo del blog, no voy a permitirme expresar en palabras, lo que pienso.
Como venía contando, la angustia aumentaba, me sentía “atacada” no encuentro un verbo que exprese mejor lo que yo sentía, con ganas de llorar, de la bronca, de la impotencia. No sé si alguna vez sintieron esa ansiedad extrema de comer cualquier porquería, con tal de llenar un vacío que en realidad no se llena con comida, ¿y entonces que hice? comí, me prepare una rica comida a eso de las 3 A.M. porque esto paso tarde, me fume unos mil cigarrillos.  Aunque ni una cosa ni la otra hicieron que la angustia desapareciera.
Me acosté y rece, rece mucho, muchísimo nunca había rezado tanto, ni antes ni después, y le pedía a Dios que no permitiera que eso que me estaban haciendo me llegara, recuerden que yo no estaba en el mejor momento de mi vida, la muerte de mi papa fue uno de los capítulos más negros de mi historia personal, y rezando me quede dormida.
Y acá estoy, “eso” que me habían hecho no me llego.
Creo que hubo tres factores que lo impidieron, primero mi pedido desesperado al Padre, que yo digo no desampara nunca, segundo que la señora esta, no era una “bruja” con todas la letras porque en ese caso la historia podría haber terminado de forma diferente, ella tenía algo de “poder” para llamarlo de alguna forma, yo a veces siento eso en determinadas personas, pero no el suficiente. Lo que nunca me va a quedar en claro es porque esta señora cuando vio mi foto no me saco, no se dio cuenta de lo que yo era, yo en ese entonces no lo sabía, sí que me pasaban “cosillas extrañas” pero no tenía la más pálida idea. Y el último de los factores, es que era yo y no otra persona, y yo al igual que ella, tenía y tengo un don, por eso uno siempre tiene que saber con quién se mete, porque ella en ese momento no pensó ni calculo cuanta nafta me quedaba a mí en el tanque, pero evidentemente bastante.
Solo algo mas ¿Qué retorcido todo no? Mi viejo se había muerto, el que encargo eso, me quería ver muerta, es lo que yo creo, ¿la envidia lleva a tanto? Que tanto mal le pude haber hecho yo a alguien para merecer algo así, son cosas que jamás pude entender y aun hoy después de tantos años y a lo lejos a veces me permito pensar en eso, y sigo sin entender, será porque yo no soy retorcida, porque no le deseo mal a nadie, porque no hago planes maquiavélicos para que otros caigan, creo que la maldad no la entiendo porque simplemente no está en mi ser así.
Ojala esas personas, sean mejor de lo que antaño, la que encargo “el trabajo” y la que lo realizó. Ojala se les haya abierto la cabeza y el corazón, para entender que el mal no se le desea a nadie, ojala lo hagan en vida, porque después, una vez que la gente muere, ya no hay marcha atrás, es así, pueden creerme o no, pero de no revertir sus actitudes, de no cambiar, son candidatas a quedar en el limbo, entre el cielo y la tierra, me dolería son dos almas que se pierden y yo ya explique que amo las almas. Toda la luz para que salgan de la oscuridad.
A los que me leen los abrazo desde mi corazón, los quiero mucho.
Eritrea.
“Jamás devuelvan el mal con mal”

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