Cuentas Pendientes

Bueno esta es una historia reciente, paso en la facultad hace poco, pongámosle dos o tres semanas atrás. No lo recuerdo con exactitud.

Estaba cursando una materia, un día lunes, tarde, el aula es  enorme, caben 200 personas tranquilamente, la sala es más larga que ancha, y los bancos (individuales todos ellos) están distribuidos como en dos bloques dejando un pasillo central  en el medio, por medio del cual se llega hasta el escritorio y pizarrón que están adelante en el frente de la sala.

Estaba ese día sentada, con mis amigos de la facu, en el sector izquierdo de la sala,  recuerdo donde se ubicaba marina, en un banco adelante mío, pero no donde se encontraban mis otros dos amigos hanalea y jhon (mándale nombre ficticio). Y hacia atrás quedaban unos cuatro o cinco bancos desocupados, nos habíamos quedado en el fondo del aula.

En eso marina se da vuelta, no sé por qué motivo y ve en un banco de atrás una sombra, enseguida me dice che, hay alguien allá al fondo, me doy vuelta y veo a alguien sentado en la misma fila que nosotras, pero en el último asiento, lo que llego a distinguir es que tenía algo rojo arriba pongámosle un buzo o un pullover, “se” que era hombre y joven, nada más es todo lo que capte en ese momento.  Mis amigos no sabían nada de estas cosas que nos pasaban a nosotras en ese entonces, así que nos callamos y esperamos a estar solas para poder hablar tranquilas del tema.

Nos quedamos con la duda, que quien era,  y de porque estaba ahí. Pero lo bueno es que las dos coincidíamos en que alguien estaba en ese banco en particular.

El sábado, día del  curso que dicta Ágata, cuando finaliza y nos quedamos solas, le comentamos este tema, del fantasma de la facultad, ella lo logra visualizar, dice que también es un hombre, coincidiendo con nosotras, que es joven y le “ve” algo rojo arriba,  nosotras queríamos saber porque estaba ahí, Ágata nos hace saber que el motivo por el cual esta es el  profesor, “que no es muy trigo limpio”, no sé si uso esta frase, pero sí que dijo algo similar. Y que estaba porque tenía asuntos pendientes con él.

Marina recordaba, que también él dijo (el fantasma claro está) que nos iba a cuidar, y que no iba a dejar que nos pasara  nada malo.

Se comenta, por los radio pasillos de la facu, que el profe en cuestión es de esos que te dicen: “ yo te ayudo a vos, si vos me ayudas a mi” puede, que solo sea un chusmerio barato o tal vez tenga un trasfondo de verdad.

La cuestión es que dicho profesor no sabe que tiene un alma que está ahí, por él, y menos por algo pendiente.

Solo algo más que me había olvidado, nosotros lo vimos porque él nos estaba mirando.  En ese momento él no miraba al profesor sino a nosotras.

¿Qué es lo que tiene que saldar? ¿Por qué sigue en este plano? Tal vez algún día tenga la respuesta, por ahora solo tratare de ver si lo vuelvo a ver, he estado en esa aula en otra materia, pero nunca lo he visto, o sea, que está en esa materia, ese día.

Ahora si me despido, saludos y que la luz los guie siempre

Eritrea.